PROYECTO “MURAL EXTERIOR DEL COLEGIO”

Estimada Comunidad Educativa:

Desde estas líneas queremos expresar nuestra sincera gratitud por el interés, el trabajo y el esfuerzo que han demostrado todas las personas que participaron en la elaboración de nuestro mural exterior que a la vez que decora, define en no pocas pinceladas, el espíritu de nuestro colegio. Gracias, en definitiva, a las personas que diseñaron nuestra obra, la dirigieron con todo el cariño y la ejecutaron con tan buen gusto.

Desde la culminación de las obras de ampliación del patio de recreo y su remodelación estructural, siempre hemos echado de menos algún motivo plástico que decorara el muro exterior de nuestro centro en calle Fernández Fermina y que a la vez trasmitiera la esencia de nuestro ideario que recopila y ensalza los valores escolares que se preconizan en el día a día de nuestra labor docente.

La obra ya culminada, expresa los aspectos cotidianos de la actividad en el colegio desde la alegría de la infancia, su naturalidad y espontaneidad. El interés por un aprendizaje sano basado en la confianza de que disfrutaremos de un futuro plagado de oportunidades donde aplicar nuestro saber. Lápices que nos ayudarán a trazar un día de mañana de oportunidades y éxito personal. Gomas que borran el equívoco y el error para devolvernos la seguridad de la ciencia y su aprendizaje. Sacapuntas que afinan la realidad para conocerla y aprovecharla. Gafas para contemplar de forma objetiva esa verdad en la que vivimos y en la que hay que explorar para definirla y hacerla nuestra. Niños que juegan recordándonos que el futuro será diseñado para ellos, porque ellos serán sus dignos propietarios desde la alegría de sus caras que nos ofrecen seguridad, confianza y bienestar. Un microscopio en honor a Alexander Fleming, explorador de una ciencia al servicio de la humanidad. Laureles del éxito de la realidad escolar de nuestra Comunidad Educativa que sabe aunar esfuerzos para conseguir los objetivos que progresivamente nos vamos trazando.

 A lo largo de estos días de elaboración, con frío y humedad pero con amor e ilusión; hemos podido contemplar la camaradería, el espíritu abnegado de padres y madres que nos han ayudado a crear una idea, un deseo común de decir a nuestros vecinos quiénes somos, qué hacemos y cuál es nuestro camino. Valor plástico ineludiblemente unido al valor humano expresado a base de colores, trazos e ilusión que hace reflexionar sobre lo importante que es la unidad, el esfuerzo común, la buena convivencia y la amistad entre iguales.

Esta obra debe perdurar en el tiempo y ello es labor de todos. Este cuidado debe abarcar tanto la conservación del mural en sí, como los auténticos valores que lo han hecho posible. Invitamos a todos y todas a proteger este símbolo sincero de fraternidad. Que nos dure muchos años.

Definitivamente como Comunidad Educativa hemos sentido la necesidad de expresarnos y lo hemos conseguido hacer con una sola y firme voz. Quién vea nuestro mural, sabrá que detrás de él guardamos el futuro de nuestras vidas y que ese futuro se sustenta sobre personas con ideas nobles, claras y útiles. Detrás del mural guardamos un tesoro único y esperanzador, nuestros niños y niñas.

¡Qué no haríamos por ellos!

Antonio A. Ruiz.
Director.